Hace tiempo que no doy un repaso a uno de mis programas favoritos de la tele: los anuncios. Parece que las estrategias para vendernos la moto no han cambiado mucho últimamente, pero ya sabéis que a mí me gusta sacarle punta a casi todo, y a algunas cosas resulta bastante fácil sacarles punta. Here we go:
- "Hace falta tiempo para derretir un corazón", dice un anuncio de helados. Cierto. En cambio, para congerlarlo y dejarlo duro como una piedra sólo hace falta un (mal) momentito. Paradojas de la vida...
- "Mi gemela y yo solemos llevar la misma ropa...". Pues ya tenéis una edad, eh... Me sorprende la capacidad que tienen algunos creativos para provocar la suspensión de credulidad en sus clientes, especialmente cuando hay un detergente de por medio.
- Me autoplagio de Twitter: si el checo viene de Checoslovaquia y el chaleco, de Chalecoslovaquia, entonces, ¿los Cheetos?, ¿y los ch...? Bueno, da igual, que me lío...
- Resulta francamente tranquilizador comprobar como a un genio de la alta cocina, referente mundial en la materia, elegido mejor chef del mundo y etc., lo que le gusta en realidad es una birra fresquita y un par de huevos fritos. Al mundo aún le queda un resquicio de normalidad.
- Resulta que existe algo llamado "melena mediterránea". Y no es una enfermedad, es pelo. Paz Vega, sevillana de pies a cabeza, la tiene. Según eso, yo tendría un pelito mesetario, o algo parecido. Aunque de aquí a unos años tendré un melón de Villaconejos...
- ¡Atención! A Uma Thurman le apetece más beberse una tónica que el sexo. Se nota que la carrera de una estrella de Hollywood está en pleno ascenso hacia la cima porque puede elegir proyectos sin hacer nada que resulte... ridículo...
- El maravilloso mundo de los seguros: unos te ofrecen unas condiciones supermegachachis "sin pedir nada a cambio". Lo que en mi pueblo se llama dar duros a cuatro pesetas, vaya. Otros, en cambio, tiran de baratismo y ofrecen seguros a un euro. Eso sí, contratan a Batman para el anuncio. Cualquiera les echa luego en cara que no saben distinguir el techo de un coche del capó.
- "Siéntete orgulloso de tu nombre, porque es tu herencia". Sinforoso Navalpijo y Eufrasia Macarrón no están de acuerdo. Pero al menos ya han perdonado a sus padres.
- Las compañías apelan al buen rollito y a los sentimientos para llamar la atención del consumidor, eso ya lo sabíamos. Pero la posmodernidad y el cabreo general le han añadido elementos interesantes al proceso. El "parado de Mahou" fue víctima hace unos días de un ataque de coñas marineras en Twitter que le convirtieron en TT. Igual va a ser que no todo cuela. Afortunadamente, la marca no necesita demasiada publicidad para seguir triunfando...
- "Ahora tu cola puede ser más grande". No es un mensaje de mi bandeja de spam, aunque podría serlo. Es el último eslogan de Pepsi, para aludir a que ahora la lata tiene más capacidad. Eso sí, en la foto sale un chaval negro, en plan novedad, porque todos sabemos que a los publicistas no les gusta tirar de tópicos.
- Como me gusta dar propinas, añadiré una cosa que no sabemos: ¿el anuncio de la colonia Gucci con Chris Evans promociona más a Gucci o a Chris Evans? Porque yo tuve que investigar para saber qué anunciaba el spot en cuestión...